¡¡Y lo hemos traspasado!! , esa es ahora la rotunda frase que se deben estar preguntando en la planta noble del estadio Santiago Bernabeu, los directivos madridistas y especialmente, el presidente Florentino Pérez que ve como su segundo proyecto de su segunda temporada, “Proyecto Mou”, poco a poco, agoniza, con el Barça líder, con diez puntos de ventaja sobre el equipo blanco, con la liga prácticamente decidida, con el más que cuestionado Benzema que propicia una falta de gol más que preocupante y la sensación de una mala planificación de temporada, vendiendo al buque insignia del equipo, Raúl González Blanco, que curiosamente, ha marcado más goles que Benzema y Adebayor juntos (15 en total) y que ha conducido al humilde equipo germano del Schalke 04, a la final de la copa alemana, tras lograr el tanto de la victoria ante el todopoderoso Bayern Munich, en la semifinal de dicho campeonato teutón .
El encuentro fue un duelo de estrategias, entre dos expertos en estas lindes como son Louis Van Gaal, por parte del Bayern y Felix Magath, por parte del Schalke.
El gran trabajo defensivo del cuadro minero, especialmente de sus dos laterales (Uchida y Sarpei), frenó todos los ataques rojos por sendos costados, con Robben y Ribéry muy desafortunados en el día de ayer.
El gran arranque de los del Allianz Arena no se tradujo sin embargo, en claras ocasiones de gol, lo que animó al conjunto minero que poco a poco, fue soltándose el asedio inicial de los subcampeones de Europa, estirando líneas y llegando con peligro al área de Kraft. Así, en el minuto 14’, la gran estrella del cuadro azul, Raúl, ya avisó de sus intenciones, en un remate con su pierna zurda que desvió a córner Gómez, en lo que fue el anticipo del tanto visitante.
Un minuto después, un centro desde el lado diestro del central Höwedes, lo cabeceó el “7” a la red (0-1), un gol a la postre definitivo y que enmudeció a los 69000 espectadores que abarrotaban el Alliianz Arena.
En la segunda mitad, los de Felix Magath aguantaron todas las embestidas de los anfitriones que lo intentaron de todas las maneras posibles topándose, una y otra vez, con la rocosa defensa del Schalke y con su guardameta, Never, que realizó tres paradones de mérito, a disparos de Ribéry, Gómez y del recién incorporado Klose que durante los quince minutos que estuvo sobre el césped, fue el jugador más incisivo del cuadro de Van Gaal, un Van Gaal que vuelve a toparse en su carrera deportiva con Raúl que tal y como le ocurrió en anteriores etapas, vuelve a ser su pesadilla, enmudeciendo con sus goles al Allianz Arena en esta campaña 2010-11, tal y como hiciese en el Camp Nou defendiendo la camiseta del Real Madrid en la temporada 1999/00, en un encuentro liguero ante el eterno rival de los blancos, el F.C.Barcelona, por entonces dirigido por Louis Van Gaal, en una temporada que curiosamente, finalizaría con el Real Madrid ganando su octava Copa de Europa, con un golazo de Raúl en dicha final en el estadio francés de Saint Denis ante otro equipo español, el Valencia. Sin duda, una situación que podría volver a repetirse ya que los del Veltins-Arena se encuentran vivos en la Champions League, además de meterse en la final de la Copa de Alemania del próximo 21 de Mayo en Berlín contra el Duisburgo, en la que será la primera final de copa, la tercera de su carrera deportiva, que dispute Raúl en su nueva aventura germana. La pesadilla de Van Gaal tiene nombre y apellidos, Raúl González Blanco….
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