Un golazo de Di María y otro de penalty, anotado por Van der Vaart, en su despedida como jugador del Real Madrid, sellan el triunfo madridista en la XXXII edición del Trofeo Santiago Bernabeu, ante el conjunto uruguayo del Peñarol de Montevideo.
A pesar del triunfo merengue, los pupilos de Mourinho no han realizado un buen encuentro, especialmente, en la primera mitad, donde los del paseo de la castellana no realizaron un juego vistoso, con un doble pivote, Xabi Alonso-Khedira, demasiado plano, siendo Canales y Özil, las manijas del equipo, aportando sobre todo, el primero, pequeños destellos de calidad.
El técnico portugués, José Mourinho, alineó a su más que probable, once titular, con la única excepción de Lass, en el lateral diestro, debido a la baja por lesión por Pepe que obligó al entrenador luso, a colocar a Sergio Ramos, de central, junto a Carvalho.
La primera gran ocasión de los blancos, llegó en el minuto 12', en un internada de Marcelo por el costado zurdo que Higuaín remató a la red, en posición de fuera de juego. Sin duda, fue la única ocasión del "pipita" que al igual que sucediese en Alicante, estuvo desaparecido, algo que deja en evidencia, a la directiva blanca que no quiere conceder a Mou, su último deseo, fichar a un delantero centro.
Además del gol anulado a Higuaín, los de la capital de españa gozaron de tres claras ocasiones, para haber perforado el marco uruguayo. La primera de ellas, en un remate al poste, de Xabi Alonso, tras un saque de esquina botado por Cristiano. Sería el portugués, el que gozara de las dos siguientes oportunidades para haber puesto a su equipo por delante, en dos centros envenenados por la banda izquierda que rozaron el larguero del meta Sebastián Sosa. Sin duda, un Ronaldo, más participativo, pero al que le sigue faltando, esa "chispa de velocidad", que le hace ser, uno de los mejores jugadores del mundo.
En la reanudación, Mou introdujo cuatro cambios, situando en el interior derecho, a Pedro León por Özil, a Gago en el mediocampo por Khedira, a Benzema por Higuaín, en la punta de ataque y a Arbeloa en el lateral derecho por Lass. Unos cambios que dieron profundidad, al equipo, gracias sobre todo, a la línea de creación, Ronaldo-Canales-Pedro León, que volvió a brillar como lo hizo en aquel amistoso ante Los Ángeles Galaxy, demostrando el enorme talento que tanto León como Canales atesoran, razones más que suficientes, para ser titulares en este Real Madrid.
Las internadas por el carril diestro de León, unidas a su conexión con Canales, permitieron a Ronaldo, gozar de tres ocasiones para haber abierto el marcador. Sin embargo, la falta de puntería, del "nuevo siete" blanco, impidieron su objetivo.
Otro de los jugadores que revolucionó el encuentro fue Di María que saltó al campo, en el minuto 57', por un lesionado Gago. El argentino se reivindicó como en Alicante, firmando un golazo con su pierna izquierda, tras recortar en tres ocasiones al central Rodríguez para posteriormente, batir a Sosa, con la pierna izquierda. Sin duda, un gol que puso en pie, a todo el Bernabeu que confía en el talento de este joven extremo zurdo que tanto ha maravillado en el Benfica y que confía en hacerlo también, con la elástica madridista.
Otro de los que recibió la ovación del público, fue Canales que fue subtituido por Granero, reconociéndole el coliseum blanco, el enorme talento que lleva dentro, este joven mediapunta de la selección sub 19.
Con el partido roto, Van der Vaart gozó de sus últimos minutos con la camiseta del Real Madrid y volvió a ser, uno de los mejores, dejando en evidencia a Mou que ya le ha comunicado que es uno de tres descartados, junto a Drenthe y Mamadou Diarra.
El mediapunta tulipán, sufrió una dura entrada de Rodríguez, en el área pequeña que fue castigada con la pena máxima que el propio Van der Vaart lanzó, algo que sus compañeros no le impidieron hacer, ya que entendieron que era un homenaje, de otro jugador con gran talento y calidad que lamentablemente, sale por la puerta de atrás.
Rafa," el artista", ejecutó con maestría, el lanzamiento, haciendo el (2-0) definitivo, levantando los brazos hacia el fondo Sur, en señal de despedida, algo que el propio Mourinho contempló, ya sentado en su banquillo.
En definitiva, una victoria en el Trofeo Santiago Bernabeu que no acaba de convencer a la parroquia blanca que a pesar de todo, espera con ilusión, el inicio del campeonato liguero, el próximo domingo (21:00) en Mallorca, ante el conjunto balear, un equipo que se convirtió en la pasada campaña, en la revelación de dicho campeonato de liga, logrando plaza de Europa League, con la quinta posición.
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