No era nada sencillo, con un público madridista demasiado frío y abroncando a sus jugadores al inicio del partido, algo que aprovechó DKV Joventut para añadir un poquito más de “sal y pimienta” en la herida blanca, cerrando el primer parcial por (13-16), tres arriba para la “penya” que plantó cara a los madridistas durante los tres primeros cuartos pero que gracias a un enchufadísimo, Sergio Llull (13 puntos), quizás lavando sus penas por encararse con la afición el pasado jueves tras el descanso, y al acierto exterior de la pareja estadounidense (Tucker&Fisher), nueve y diez puntos respectivamente, el Real Madrid logró sobreponerse y cerrar el duelo por (78-60), dieciocho puntos a favor de los de la Caja Mágica, en el primer encuentro de la era post-Messina y la nueva era Molin, la etapa de transición hasta final de temporada, donde sin embargo, los blancos confían en conquistar algún título (Liga o Euroliga), en una temporada a priori, cargada de ilusión y de optimismo y que tras la derrota en la final de copa del rey ante el Barça y la dimisión de Messina, parecen haberse frenado, en cierto modo, algo lógico y evidente tras el inesperado adiós del técnico italiano del Real Madrid en el momento más importante de la temporada y cuando su equipo más le necesitaba.
Con una afición muy descontenta con su equipo tras la pobre imagen mostrada en jueves en Euroliga, el DKV aprovechó el desconcierto inicial de los merengues para abrir una pequeña renta en el marcador (2-11), ocho arriba para los verdinegros a menos de cuatro minutos para el final del primer acto. Sin embargo, el nuevo entrenador Molin, no perdió los nervios y dio entrada a Tucker y Dór Fischer que con su acierto desde el tiro exterior apretaron el resultado, frenando la sangría anotadora de los del Olimpic de Badalona que a pesar de todo, lograrían anotarse este primer parcial por (13-16).
En el segundo cuarto, la aportación en la pintura de Ante Tomic (13 puntos) y en el juego exterior de Tucker, fue fundamental para dar la vuelta al resultado y poner a los de la capital de España por delante (33-31), al término de la primera mitad siendo esencial el trabajo de Begic en los últimos compases de estos primeros veinte minutos, logrando dos tapones y anotando cinco puntos consecutivos.
En la reanudación, los del paseo de la castellana se encomendaron al gran Sergio Llull, el salvador merengue en los momentos más complicados, para abrir una mayor renta en el electrónico (44-33), con dos triples consecutivos del menorquín y cinco canastas consecutivas del veintitrés blanco que se reconcilió con la Caja Mágica, llegando a alcanzarse la máxima renta, a menos de dos minutos para la finalización del tercer acto con (54-41), trece arriba para los madridistas.
En el último cuarto, DKV no bajó los brazos y con 13 puntos consecutivos de Jelinek apretó el marcador (63-57), a falta de cinco minutos para la conclusión del encuentro. Sin embargo, un nuevo arreón madridista sería definitivo, con dos triples consecutivos de Carlos Suárez y Sergio Llull que pusieron el marcador (69-57), doce arriba para los de la capital de España, asestando la puntilla a los de Pepu Hernández, el entrenador que quiere la directiva blanca para la próxima campaña, por (78-60).
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