Los Ángeles Lakers han logrado una sufrida victoria en la prórroga ante los Houston Rockets por (116-109), con un sensacional Pau Gasol que sumó 26 puntos y 16 rebotes y un enchufadísimo Briant que con 32 puntos y 11 asistencias volvió a ser el máximo anotador del encuentro.
Por los Rockets, la aportación de Brooks (16 puntos) y sobre todo, en el gran juego interior de Kevin Martin (30 puntos) pusieron en aprietos a los amarillos en el segundo periodo, llegándose a la prórroga con empate a 98, tras un triple fallido sobre la bocina por Odom. Sin embargo, en el tiempo extra, los angelinos no fallaron y se impusieron por (114-106), en su primera victoria tras el varapalo sufrido el pasado domingo en el Staples Center ante los Boston Celtics.
El encuentro comenzó de cara para los bicampeones de la NBA, gracias a la fortaleza defensiva demostrada por Odom (20 puntos) y a la aportación ofensiva de Pau Gasol que abrió una pequeña brecha en el marcador (15-8), ayudado por Fisher (11 puntos) y Artest (9 puntos).
A todo ello, se unió un resucitado Briant que alcanzó los 25000 puntos y las 5000 asistencias en la NBA, liderando a su equipo en los últimos minutos del primer cuarto que se cerró con (31-23), a favor de los amarillos.
En el segundo cuarto, los Rockets reaccionaron con la entrada de Brooks, decisivo desde el tiro exterior para apretar el partido (49-48), auxiliado por los suplentes Lee y Budinger, aunque un enchufadísimo Briant sería decisivo para mantener la renta a su equipo por delante en el descanso (54-48).
En el tercer periodo, los pupilos de Adelman, especialmente, sus hombres del banquillo mantuvieron un gran nivel, oxigenando a sus compañeros del quinteto inicial. Así, un triple de Scola (24 puntos), permitió a los Rockets ponerse por delante (61-64) al inicio de este tercer acto. Sin embargo, los angelinos liderados por Briant y Gasol no cayeron en los desajustes del último encuentro ante los Celtics, llegándose al último cuarto con empate a 74, con un enchufado Gasol y un rocoso Odom sobre la pintura.
En el último asalto, el tridente formado por (Blake-Odom-Brown) pusó a los del Staples Center ocho puntos arriba (86-78), aunque Houston reaccionaría en el perímetro e igualaría el encuentro a 86, llegándose a la prórroga tras un triple fallido sobre la bocina por Odom.
En el tiempo extra, los Lakers impusieron su autoridad, especialmente, desde la línea de personal con un decisivo Gasol y Briant que devolvieron a los Lakers a la senda de la victoria (114-106), tras haber sufrido dos duras derrotas en su propia cancha ante los Kings de Sacramento y el pasado domingo ante los Boston Celtics.
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