La selección española de hockey sobre patines sigue engordando su amplísimo palmarés deportivo, tras ganar su sexto título consecutivo de Europa, al derrotar en la final a Portugal por (8-2).
Los "hexacampeones" continentales, han demostrado a lo largo de todo el torneo, su superioridad sobre todos sus rivales que han sido víctimas de la "roja", la mejor selección de Europa y del Mundo.
Entre los muchos registros conseguidos por este extraordinario equipo, está el acumular 43 partidos sin conocer la derrota, haber ganado los seis últimos europeos, ganando por lo tanto, todos los europeos del siglo XXI y los tres últimos mundiales, algo inédito en la historia del hockey patines.
La final se puso de cara para los pupilos de Feriche que se adelantaron el minuto 3', gracias a un robo de balón de Bargalló que sirvió al segundo palo para que Pedro Gil, hiciese el (1-0). Sin duda, un gol que motivó a nuestros jugadores que marcaron un ritmo infernal en estos primeros minutos de partido.
En el minuto 8', una gran jugada de Ordeig significó el (2-0), tras recortar el delantero español al meta Silva y marcar "a puerta vacía". Sin duda, una genialidad propia de uno de los mejores jugadores del torneo, una pieza esencial en este maravilloso equipo español.
En el minuto 12', Pedro Gil aprovechaba una gran triangulación con Bargalló y Ordeig para hacer el (3-0). Un gol que parecía sentenciar la final en apenas doce minutos de partido. Sin embargo, Portugal demostró ser una extraordinaria selección, capaz de cambiar el signo de un partido, con cualquier genialidad de sus jugadores. Así, en el minuto 15', Barreiros aprovechó una "bola muerta" para perforar las mallas españolas (3-1).
A falta de dos minutos para el descanso, Portugal volvería a golpear, gracias a un fuerte disparo de Acevedo que situó el (3-2) en el electrónico. Sin duda, un tanto que metía a Portugal en el partido aunque la ilusión de los lusos, duraría apenas un minuto, el tiempo que transcurrió hasta que un disparo de Ordeig, tocó en la defensa portuguesa y se coló en su portería (4-2).
En la segunda parte, Bargalló lograría el (5-2) en un potente disparo. Sin duda, un gol que mermó la moral de los portugueses de cara a este segundo acto.
A falta de cinco minutos para la conclusión, Portugal se volcó sobre el área española, algo que aprovecharon nuestros jugadores para dar la puntilla a los lusos y cerrar la final con tres tantos más, de Bargalló (6-2), Torra (7-2) y Adroher (8-2).
Los últimos segundos del encuentro fueron una fiesta en el banquillo español que estalló de alegría, como el pitido final que daba a nuestra selección su "sexto campeonato de Europa consecutivo".
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