La intachable racha victoriosa del Real Madrid en este top 16 de la Euroliga se puede consumar con la primera plaza del grupo G, esta misma noche (20:45, Teledeporte) ante el Partizán de Belgrado, si los blancos logran la victoria en la "batalla de Belgrado", donde el Partizán croata espera, eso sí, ya eliminado pero con las garras afiladas a uno de los mejores equipos de Europa, el Real Madrid de Ettore Messina, subcampeón de Copa en los dos últimos años, segundo en la ACB y ya clasificado para los cuartos de final de la máxima competición continental, gracias a los cuatro triunfos logrados en los cuatro partidos disputados en esta segunda fase de dicha Euroliga.
Los blancos llegan a la cita muy heridos, tras la bochornosa derrota sufrida en ACB el pasado sábado en la cancha del Power Electronics Valencia, donde los de la Caja Mágica firmaron el peor registro anotador en la competición doméstica desde la campaña 1964/65, donde los madridistas sucumbieron ante el Picadero, anotando sólo 45 puntos, siete menos que los anotados por los merengues, el pasado sábado en "La Fonteta" (52 puntos). Sin embargo, la enorme trayectoria realizada por el equipo español en este top 16, ganando a Partizán y Efes Pilsen en la Caja Mágica y ha dicho equipo turco y a los italianos del Montepaschi de Siena en tierras otomanas e italianas, otorgan a los de la capital de España un "plus de favoritismo" para asaltar el "Beograd Arena", un auténtico infierno al estilo de los antiguos pabellones de la ex Yugoslavia, un escenario muy complicado donde el público es el jugador número seis, con 20000 incondicionales a un equipo balcánico venido a menos, técnicamente muy inferior al Real Madrid, donde sólo el joven Vesely, un alero de 2,10 metros que recientemente arrebató al base del Regal Barça, Ricky Rubio, el premio de "mejor joven de la Euroliga", representa el presente y el futuro de un residual Partizán que se encuentra en una etapa transitoria, de cada a volver a codearse en los próximos años con los grandes del viejo continente.
El choque será especial para el jugador balcánico del Real Madrid, Velikovic, que volverá a la que fue su casa y donde se formó y explotó como una grandísima promesa del basket croata. Así, Messina quiere premiar al pívot blanco que formará en el quinteto inicial, posiblemente de cuatro y acompañando a Tomic, en parte debido a las molestías del capitán, Felipe Reyes, en su tobillo izquierdo que es sería duda para la cita de esta noche.
Las cuentas de los madrileños son claras, ganar en Belgrado esta noche y dejar matemáticamente sentenciada, la primera plaza del grupo G, para evitar nervíos innecesarios en la última jornada de este top 16, donde se medirán al Montepaschi de Siena, obligado a ganar hoy en su propia cancha, a los turcos de Elfes Pilsen para mantener vivas sus opciones en esta segunda fase de la Euroliga.
Si los blancos no lograran vencer al Partizán y el Siena derrotase al Efes Pilsen, a los pupilos de Messina les bastaría con ganar al Montepaschi en la Caja Mágica en el último encuentro o caer derrotado por menos de diez puntos de renta, para acceder a ls cuartos de final como campeón de grupo, una circunstancia esencial para mantener el "factor cancha" en dicha eliminatoria, algo que ha adolecido el equipo madridista en las anteriores citas de este formato de Euroliga y es una de las razones que explica el porqué llevan 15 años sin jugar una "Final Four", una nefasta y duradera racha negativa que podría romperse esta edición, por lo que es fundamental meterse entre los ocho mejores equipos de Europa, como primero de este grupo G.
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