El Real Madrid ha saldado su compromiso liguero ante el Valencia, con una victoria que sino convence ni sirve para lavar los pecados del clásico, si que deja a los blancos segundos en la tabla con 35 puntos, a dos del Barça, el gran líder del campenato nacional de liga, una victoria fraguada en dos goles de Cristiano Ronaldo que sigue manteniendo el "pichichi" con 17 goles, dos más que Leo Messi que es segundo con 15 tantos.
Con un ambiente frío y silencioso, recibió la parroquía madridista a sus jugadores, heridos en su orgullo tras la contundente derrota en el Camp Nou. Sin embargo, el tener enfrente a un gran Valencia, quinto en liga con 24 puntos y clasificado para los octavos de la Champions, hizo que el público del Bernabeu se olvidase de la mala imagen dada por su equipo el día del clásico y se centrase en saldar el duro examen ante el Valencia, un examen obligado a aprobar para no perder la estela del Barça que al comienzo del encuentro, ganaba (0-1) en el Reyno de Navarra, demostrando que ni siquiera la famosa huelga de "controladores aéreos" y las horas de tren y autobús, pueden con los de Guardiola que con dos goles de Messi y otro de Pedro, han saldado su compromiso en Navarra con un contundente (0-3).
El encuentro comenzó con un Madrid intermitente, con el trivote defensivo ( Xabi Alonso-Lass-Khedira) que tanto meditó poner Mou en el clásico, aunque con Özil por delante y Cristiano Ronaldo como único punta atacante, relegando a Benzema a la suplencia.
La conexión ché (Mata-Soldado-Joaquín), ocasionó problemas en la defensa blanca, sobre todo, con las internadas valencianistas por ambos costados que obligaron a frenar el ímpetu ofensivo de Marcelo y de Arbeloa en la primera mitad. Sin embargo, las penetraciones de Mata y de Joaquín no fueron finalizadas por un desacertado Soldado, al que le seguramente, le pesó demasiado el verse en el Santiago Bernabeu ante el equipo de su vida, en un escenario donde siempre soñó con triunfar.
Las mejores ocasiones fueron para los merengues, gozando los del paseo de la castellana de tres claras oportunidades para batir a Guaita que la falta de puntería de los locales impidió abrir el marcador. Así, la primera gran ocasión de los blancos, llegaría en las botas de Khedira, en un claro mano a mano del bávaro con el meta valenciano que sin embargo, el mediocampista germano no supo materializar, estrellándose el esférico en las manos de Guaita.
La segunda oportunidad sería en una falta lanzada por Özil que repelió con una gran parada, Guaita, demostrando ser un portero con un enorme futuro, capaz de defender la portería del Valencia durante las próximas temporadas.
La tercera y última ocasión del Real Madrid en este primer acto, llegaría en un gran "taconazo" de Ronaldo a centro de Arbeloa que sin embargo, repelió la madera, en una oportunidad que arrancó los aplausos del público de chamartín.
En la reanudación, el Valencia estiró líneas y pudo haberse puesto por delante en el electrónico, en dos oportunidades de un incisivo Joaquín que Iker en primer lugar y escasos centímetros, necesarios para que el del Puerto de Santamaría, conectara un gran centro de Mata desde el lado izquierdo, impidieron a los de Emery, ponerse por delante en el marcador.
En el otro área, el Madrid también gozó de dos claras ocasiones para haber perforado el marco de Guaita, en dos remates de Cristiano que el meta ché repelió con los pies y en otra clara ocasión de Di María que intentó batir con una vaselina a un Guaita que estuvo muy rápido de reflejos.
En el minuto 65', la expulsión de Albelda por doble amarilla condicionó el choque, una dudosa segunda amarilla señalada por Pérez Lasa, por interceptar el seis del Valencia, el balón con el antebrazo, algo que David protestó airadamente al colegio y al cuatro árbitro, alegando que interceptó el esférico con el hombro.
Emery dio entrada a Banega por Mata, con el fin de reforzar el centro del campo de los de Mestalla, algo positivo y a la vez, negativo para los mediterráneos ya que con la entrada del argentino, el equipo ché aportó mayor calidad y circulación de balón aunque perdió en fortaleza defensiva, algo peligroso ante un Madrid rapidísimo, sobre todo, a la contra.
Lamentablemente, para el Valencia ocurrió lo segundo, en dos contragolpes madridistas que fueron letales y materializados por un auténtico depredador al contraataque, Cristiano Ronaldo. Así, el portugués abrió la lata valenciana en el minuto 74', en un contragolpe conducido por Özil que CR7, culminó con un "latigazo" con la zurda que batió a Guaita (1-0).
El gol no amilanó a los visitantes que tuvieron en el empate cuatro minutos después, en un saque de esquina de Tino Costa que Soldado remató de cabeza por encima del marco de Casillas. Sin duda, un mal para "El Guerrillero", en un choque especial para el nueve del equipo del Turia que en el día de hoy, no se mostró afortunado de cara al marco rival.
Antes del gol de Ronaldo, Mou movió ficha dando entrada a Benzema por Khedira y justo tras el gol del luso, el doble cambio que tenía preparado el luso, Pedro León y Granero por Di María y Özil, se quedó sólo en una sóla subtitución (Granero por Özil), un cambio defensivo volviendo el Madrid al trivote inicial (Alonso-Lass-Granero) jugando, eso sí, con dos puntas (Cristiano-Benzema).
En el minuto 86', llegaría el (2-0), en un contragolpe iniciado por Lass que conectó con Ronaldo que tras una portentosa carrera hacía el área ché, resolvió disparando un "misil" con la pierna diestra que atravesó las mallas rivales (2-0).
Con el partido sentenciado y Ronaldo extramotivado con sus 17 goles, dos más que Messi, Cristiano realizó otra soberbía internada por el costado derecho cuyo centro no conectó Benzema, por escasos milímetros, en lo que hubiera sido el tercer tanto del Madrid.
En definitiva, los del paseo de la castellana aprueban su segundo gran examen de la temporada sin realizar un fútbol vistoso pero apelando a lo que este equipo mejor sabe hacer, las contragolpes demoledores de su gran matador del área, tras la ausencia de Higuaín, Cristiano Ronaldo, pichichi del campeonato con 17 dianas en 14 partidos.
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